La calidad de vida refleja muchas actitudes positivas. Entre ellos, la práctica de actividades físicas, dietas sanas, momentos de interacción social, entre otros. Para los que tienen más de 60 años, el cuidado debe ser aún mayor. Por lo tanto, la comida para los ancianos debe estar llena de un menú variado, rico en proteínas, vitaminas, carbohidratos, frutas, verduras, etc.
Para ayudarle a priorizar la salud, le mostraremos, en este post, 7 consejos que deben estar siempre presentes en su casa! Pero primero, ¡vean la importancia del control de los alimentos!
¿Cuál es la importancia de la comida para los ancianos?
El cuerpo humano tiene una validez. Así, los huesos se desgastan, las células se debilitan y los músculos pierden fuerza. Sabiendo que la estructura del cuerpo sufre cambios a lo largo de los años, como las hormonas, nada mejor que asegurar siempre un fortalecimiento a través de buenos hábitos.
Además de una vida regular y un buen sueño nocturno, la alimentación sana hace una gran diferencia. Esto se debe a que es necesario mantener la masa muscular y aún así prevenir enfermedades que son comunes en este momento, como la diabetes, la hipertensión, el cáncer, la osteoporosis y otras enfermedades.
Así, se indica una orientación profesional de un endocrinólogo o nutricionista para que el menú sea acorde con la realidad de cada persona. Después de todo, cada uno tiene una historia de vida y posibles restricciones. Por lo tanto, vale la pena buscar ayuda. Ahora que sabes lo importante que es tener una dieta equilibrada, ¡vean los consejos que hemos separado de su salud!
1. Priorizar los alimentos naturales
La industrialización de los alimentos ha abierto un abanico de opciones en los supermercados, pero manténgase atento: los productos empaquetados y fraccionados suelen tener pocos porcentajes de vitaminas, mucho sodio, conservantes y otras sustancias químicas perjudiciales para la salud.
Teniendo esto en cuenta, nuestro consejo probado por los expertos es la elección de alimentos naturales, como los que existen en el sector de las frutas y verduras o en los mercados libres de su ciudad. Si puedes permitirte comprar comida orgánica, mejor.
Observe en el envase si el producto está hecho a mano, si hay una referencia de la granja y elija los productos más frescos. Siguiendo esta práctica, compra frutas, verduras y hortalizas, insertando una variedad en tus comidas, como una sopa en la cena.
2. Consumir fibras
Las fibras son muy importantes en la dieta de los ancianos debido al control de la glucosa, la reducción del colesterol e incluso la prevención del cáncer de colon. Además, aumentan la sensación de saciedad, es decir, juegan un papel preponderante en el mantenimiento del peso.
Un buen consejo es insertar salvado de avena en la papaya o en las vitaminas. Los ancianos sanos pueden consumir de 1 a 2 cucharadas por día. Allí, el acompañamiento va desde su creatividad, como la fruta, la leche, en la producción de pasteles o tortas.
3. Incluir alimentos ricos en omega 3
El consumo de pescado rico en omega por lo menos una vez a la semana es esencial para ayudar a la salud de los ancianos. La sustancia tiene una función antiinflamatoria y también ayuda en la prevención y el control de varias enfermedades, como la diabetes, la artritis, entre otras.
Además, un pez pequeño siempre cae bien en el almuerzo con puré de papas, arroz y frijoles. En el caso del arroz, la orientación es optar por la integral.
4. Mantenga una rutina en sus comidas
El organismo humano necesita regularidad para funcionar bien, especialmente en los ancianos. Por lo tanto, evite comer en diferentes momentos de la semana. El consejo es siempre mantener el desayuno, el almuerzo, la merienda y la cena a la misma hora.
Incluso puedes comer una fruta entre una comida y otra, pero evita almorzar un día a la 1pm y el siguiente a las 11am, por ejemplo. El objetivo es mantener el cuerpo como un buen reloj suizo!